El drama vuelve a la vida de Taylor Swift. Ya os comenté en un post anterior que el clan Kennedy no soportaba su afán de protagonismo, lo que, unido a su supuesta infidelidad con el primo Patrick (hijo de Schwarzenegger), ha dinamitado su relación con Conor. El sueño de ser una Kennedy ha acabado.
'Us Weekly' ha dado la exclusiva y el hecho de que el representante de Taylor no confirme ni desmienta la noticia da que pensar que es cierta. La web 'ABC News' le preguntó al susodicho y él dio la callada por respuesta.
La parejita comenzó a salir el pasado verano y el cuento de hadas pronto se convirtió en pesadilla para la diva. El mayor desplante que sufrió fue su expulsión de la boda de Kyle Kennedy, un punto de inflexión en su historia de amor. Ya nunca nada volvió a ser como antes.
[Relacionado: Taylor Swift y Selena, amigas en sus rupturas sentimentales]
"En silencio se separaron hace un tiempo. Fue cosa de la distancia, sin rencores, están bien. Ha pasado más de un mes e incluso se han visto. Con la promoción de 'Red'(el nuevo disco de Taylor), ella no tendrá tiempo libre hasta finales de año", comentaba la fuente de la revista. Me alegro al menos de que la ruptura haya sido civilizada, ya temía que estos dos jovenzuelos se declararan la guerra y airearan sus trapos sucios.
Sobre el posible affaire de Taylor con Patrick no se ha dicho nada más hasta ahora. Os recuerdo lo que dijo un testigo de sus carantoñas a 'Star': "Taylor estuvo con Patrick toda la noche (...) Un día antes había terminado con Conor, de modo que tuvo citas con los primos dos noches consecutivas".
Por otra parte, no dejo de preguntarme qué hará Taylor con la casa que se compró hace dos meses en Cabo Cod (Massachusetts), por la que invirtió 4,9 millones de dólares (unos 3,9 millones de euros). Quería ser vecina de los Kennedy y se ha ganado a pulso el sambenito de "obsesiva".
Tengo una teoría muy particular sobre todo este culebrón. Taylor se ha tragado el orgullo y ha dejado a su 'yogurín', de solo 18 años, para no perjudicar la promoción de su nuevo trabajo musical. Los Kennedy estaban planeando una conjura épica y ella, de manera lúcida, ha decidido no jugarse más los cuartos. Nunca mejor dicho. Mejor, así aleja la maldición de los Kennedy de su vida.
[Y además... Taylor Swift, seria aspirante a los premios MTV Europa]
¿Os ha pillado por sorpresa esta ruptura? ¿Os creéis eso de que no se guardan "rencor"? ¿Se acabarán publicando tarde o temprano detalles escabrosos?